Las tablets o tabletas se han convertido en una de las grandes revoluciones tecnológicas de los últimos años. Han sido toda una innovación y cada año millones de unidades se venden en todo el planeta. Actualmente son el producto tecnológico de moda o al menos es uno de los más demandados por los consumidores.
¿Un producto en expansión?
Es cierto que la tablet es un producto cuyas ventas van creciendo año tras año. Sólo en España, la venta de este producto durante el 2013 subió un 68% respecto al año pasado con más de 3.8 millones de unidades. Se trata de un producto en expansión, no cabe duda. El problema se encuentra en cuál será su futuro como dispositivo.
Actualmente habréis escuchado en alguna ocasión la palabra «phablet«. Un nombre inédito para nuestros oidos y extraño a la vez. Se trata de una mezcla entre un smartphone y una tablet. Al menos en lo concerniente a pantalla. Realmente, una tablet es un smartphone sin las funciones de teléfono. Puedes hacer fotografías, puedes grabar videos, descargar aplicaciones…. Practicamente todas las posibilidades que tiene un smartphone las tiene una tablet.
El invento ha sido crear una mezcla entre ambos productos. Por un lado es un teléfono que cuenta con un tamaño de pantalla similar al de una tablet pequeña. Pero por otro no es lo suficientemente pequeño como para parecerse a otros modelos de smartphone. Gracias a ese tamaño de pantalla podemos utilizarlo para ambos fines. Para las funciones que ofrece una tableta y mientras mantener las funciones que ofrece una tablet.
Es un poco complicado de explicar pero al fin y al cabo es un smartphone con la pantalla de una tablet con pantalla de pocas pulgadas. Es decir, si hay tablets de 7 pulgadas, porque no contar con un smartphone de 6 pulgadas. Eso nos lleva a un termino medio.
¿El phablet terminará con la tablet?
A raíz de este nuevo concepto es entonces cuando nos preguntamos si el futuro de la tableta está asegurado. Quizás el consumidor termine evolucionando y apueste por este producto, más completo, más versátil y que ofrece muchas más posibilidades.
Seguramente los amantes de la tableta siempre valorarán el hecho de que este producto les permita ver películas, hacer fotos y disfrutar de juegos en un tamaño de pantalla que les permite disfrutar de la parte gráfica en todo su esplendor. Quizás el tener que hacer uso de todas estas posibilidades en una pantalla de 6 pulgadas no les seduzca. Pero quizás a una persona que no descarta tener un teléfono móvil de mayor pantalla no le importe hacerse con un phablet.
Desde luego es pronto para vaticinar cómo irá evolucionando este mercado. De lo que no cabe duda es que los gigantes tecnológicos como puedes ser Samsung y Apple tendrás bien estudiados cuáles son los gustos de los consumidores para adaptarlos a nuevos productos. Desde luego, si han apostado por la fabricación del phablet, está claro que se debe a una necesidad del cliente. Quizás en el futuro, el concepto de phablet haga desaparecer al smartphone y a la tablet. En nuestro caso apostaríamos a que antes desaparecería la tablet que el smartphone.
Foto: Tatsuo Yamashita
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